En memoria de Rolando H. Castañeda
Este
blog de Cubaeconomía hoy está de luto por la pérdida del gran
amigo y economista cubano, Rolando H. Castañeda que falleció
el pasado viernes 14 de abril en Washington, DC. Con gran pesar
quiero dar testimonio, con estas líneas, de la información tan
triste sobre la pérdida irremediable de este gran colega de los
economistas cubanos.
Personalmente,
tuve la oportunidad de conocer a Rolando en Valencia, en 2008,
durante la reunión de la ASCE en esta ciudad. Él había sido
miembro de la prestigiosa Asociación desde sus inicios, y en muy
poco tiempo pudimos coincidir en numerosos puntos de vista e ideas.
Conversamos
durante largo rato sobre las cuestiones que a los dos nos
interesaban, relativas a los problemas de la economía cubana, y en ellas tuve la
oportunidad de comprobar su profundo conocimiento sobre la macro y la micro
economía, la gestión de políticas públicas exitosas y los
aspectos estratégicos de los sistemas económicos.
Su
experiencia en organismos internacionales le permitía disponer de
instrumentos válidos para el análisis, no sólo a nivel teórico,
sino práctico sobre la realidad de la economía. Seguí durante
mucho tiempo sus colaboraciones, ciertamente de gran calidad, en los
congresos anuales de ASCE, de los que era un participante activo, y
en revistas digitales como Cubaencuentro, o en foros del exilio, como
Democracia Participativa, entre otros. Este año, en enero, alguien
mi informó durante mi visita a Miami que su estado de salud había
empeorado, pero nunca imaginé que los acontecimientos fueran a ser
tan inesperados.
Me
quedo con muy buenos recuerdos de Rolando. Los comentarios a mis
trabajos, sus críticas siempre acertadas y bien planteadas, el
interés de ambos por contactar con los economistas de la isla, pero
sobre todo, su gran humanidad y el deseo que me expresó en algunas
ocasiones, de regresar a Valencia. Una ciudad que estoy seguro que le
gustó y en la que pudo disfrutar durante su estancia.
Tan
solo quiero trasmitir mis más sinceras condolencias a su esposa,
Alicia Castañeda, así como a toda su familia.
Descanse en Paz.
Comentarios
Publicar un comentario