La inflación de Cuba en enero fuera de control

Elías Amor Bravo economista

Mal comienzo del IPC en Cuba durante el mes de enero pasado. La Oficina Nacional de Estadística e Información acaba de dar el dato y no es bueno. Los precios subieron un 2,32% en el mes de enero con respecto a diciembre.

Y lo que es peor, la tasa interanual de variación, que mide el comportamiento de la inflación entre enero de 2022 y 2023 ha sido de un 42,08% que es superior a la registrada en diciembre, que fue del 39%.

Además, comparada con la tasa interanual de enero de 2022 (con respecto a 2021) que fue de 23,26% el dato de este año es prácticamente el doble. Esto quiere decir que la inflación en la economía cubana se acelera y vuelve a tomar velocidad en este comienzo de año, con sus efectos negativos sobre la capacidad adquisitiva de la población y los precios relativos. Se tiene la impresión que el régimen ha tirado la toalla y se muestra incapaz de estabilizar la economía con políticas fiscales y monetarias adecuadas.

¿Por qué subieron los precios en Cuba de este modo tan intenso en el mes de enero? En esencia, porque cuatro componentes relevantes del IPC registraron aumentos del 2% o más en dicho mes.

El primero ha sido Restaurantes y hoteles con un 4,96% (el doble que la media) que incrementa la tasa interanual a nada más y nada menos que un 59,85% con un efecto del 20% sobre el total del índice. Analizando con detalle los artículos que han registrado un mayor aumento de precios, destaca nuevamente, la Merienda con un aumento mensual de 7,08%, seguida de Alimentos preparados para llevar, 4,29% y Almuerzo y comida, con un 4,1%.

Básicamente, se trata de bienes procesados por las actividades del sector, que cobran precios más elevados porque se ven en la necesidad de trasladar a los compradores el aumento del coste de las materias primas y alimentos sin elaborar que afrontan de sus suministradores. La inflación subyacente está siendo especialmente intensa.

En segundo lugar, Alimentos y bebidas no alcohólicas registra un 2,74% de aumento respecto del mes anterior (por encima de la media) y además, la tasa interanual más elevada 67,97% con una aportación de 53,66 al índice.

Estos dos componentes más inflacionistas son además, los que tienen un mayor peso en el índice. La aceleración de la inflación en meses venideros está servida. Los artículos que han registrado mayores aumentos de precios en el grupo de Alimentos y bebidas no alcohólicas han vuelto a ser el queso blanco, un 7,36%, el jamón, un 5,96%, la carne de carnero un 5,34% y la carne de cerdo  un 2,26% productos que se encarecen y que, además, escasean en los mercados.

El tercer componente inflacionista ha sido Muebles y artículos para el hogar, que ve crecer los precios en enero un 2,22% con respecto a diciembre y con ello, situar la tasa interanual en el 18,83%. Es este un componente del índice que ha tomado fuerza con respecto al año pasado por el traslado de aumentos de costes a los precios de venta.

El cuarto es el grupo de Bienes y servicios diversos, con un aumento en enero del 2,01% que en tasa interanual sube al 18,49%.

Se debe tener en cuenta que en estos cuatro componentes apenas destaca el peso de la inflación importada, el argumento que usan los dirigentes para justificar el descontrol de los precios. Tampoco parece que sean el resultado del embargo o bloqueo. La inflación tiene raíces internas en la economía y responde, cada vez más, a la incapacidad del modelo comunista que rige la economía para afrontar procesos que se deben regular por las leyes de mercado, mucho más eficientes.

A continuación, hay otros tres componentes del IPC que si bien registran en enero aumentos inferiores a la media, en tasa interanual se sitúan por encima del 10%. Es el caso de Educación (uno de los logros de la revolución, de prestación gratuita) y que ha visto aumentar la tasa interanual al 17,86%. También Transporte, con una tasa interanual del 15,18% y finalmente Servicios a la vivienda registra un 14,54% de tasa interanual de inflación.

El caso del Transporte merece especial atención ya que uno de los artículos del índice con mayor aumento en enero se encuentra en este grupo. En concreto, el Taxi urbano y bicitaxi ha aumentado un 10,59%, en tanto que el transporte urbano en moto lo ha hecho en un 4,31%. Una vez más, la inflación subyacente ejerciendo una influencia en la aceleración de los precios que tendrá lugar en el futuro inmediato.

Hay un componente del índice, Bebidas alcohólicas y tabaco que experimentó un descenso en la tasa mensual del 6,13% pero su tasa interanual todavía quedó en un 18,7% lo que indica que la inflación está arraigada en la economía (efecto subyacente) y a pesar de logros mensuales puntuales, la tendencia sigue siendo alcista.

El año comienza mal con los datos de inflación que se muestran especialmente negativos por su impacto sobre el poder de compra de salarios y pensiones (recae en alimentos y bienes elaborados necesarios) e introduce un factor de distorsión en los precios relativos al tener muchas actividades que trasladar los aumentos de costes a los precios para no caer en situaciones de insolvencia, como ocurrió con la entrada en vigor de la tarea ordenamiento. 

La inflación se arraiga en la economía cubana y provoca sus efectos negativos como, por ejemplo, la debilidad del peso cubano, la escasez de numerario en el sistema bancario o actuar como un impuesto injusto que golpea con más intensidad a los sectores vulnerables. El régimen, inerme.


Comentarios

Entradas populares de este blog

Muy deficientes resultados en la construcción de viviendas en el primer semestre

La bancarización ha quedado aparcada, otro experimento más a la basura

El Banco Central de Cuba como instrumento represor del régimen