La integración de Cuba en la economía mundial
Elías Amor Bravo, economista Nadie discute que la incorporación de Cuba al Banco Interamericano de Desarrollo (BID), así como a otras instituciones internacionales, como el FMI, no solo es necesaria, sino muy conveniente para lograr su apertura económica. De hecho, el régimen castrista, históricamente, ha despreciado este tipo de instituciones, afirmando su posición de independencia como uno de los logros de la llamada “revolución”, y la renegociación de la deuda del Club de París, conseguida el pasado año, se inscribe en esa política de “free rider”, que desea practicar con sus finanzas. Pero una cosa es el cántaro y otra la leche de la vaca que va dentro. Y tarde o temprano, la normalización económica internacional de Cuba exigirá su pertenencia y adscripción a los organismos internacionales de financiación y el sometimiento de su deuda soberana a las agencias de calificación, en la medida que ello permitiría acceder a financiación y asistencia técnica, necesaria en ...