Entradas

Mostrando entradas de febrero, 2017

La banca comercial en Cuba: a 50 años de atraso

Elías M. Amor Bravo Un ejemplo del atraso del sistema bancario en Cuba es el pésimo funcionamiento de los cajeros automáticos y de las pocas tarjetas magnéticas que usan los cubanos para obtener efectivo con el que pagar sus facturas. Tan deficiente es el servicio que Granma se ha hecho eco de ello, en esa nueva campaña por cuestionar aquello que no funciona bien y pedir explicaciones a los responsables. En suma, un artículo en el diario oficial castrista se ha hecho eco de la “calidad de las tarjetas magnéticas, las condiciones físicas y técnicas de los cajeros automáticos, su distribución a lo largo del país y las condiciones de seguridad a la hora de retirar efectivo de los propios equipos” y lo califican como “problemáticas actuales para los muchos cubanos que hoy dependen de esta opción bancaria”. Tal vez, lo primero que conviene tener claro es que en Cuba, el porcentaje de población que utiliza los cajeros automáticos es muy bajo comparado con el de otros países de econom

De pagar impuestos, nada

Elías Amor Bravo, economista Un artículo en Granma titulado “Impuestos: una responsabilidad social” nos obliga a realizar unas reflexiones sobre el significado de una política tributaria en un régimen autoritario, no democrático. Es cierto que el pago de los impuestos es una actividad que permite a los gobiernos obtener ingresos para financiar sus actividades. Pero la acción fiscal pertenece al ámbito de la actuación del sistema democrático y de derecho, en el que el gobierno responde de sus actuaciones ante los electores y se encuentra limitado por los poderes parlamentario y judicial. En Cuba, actualmente, esas condiciones ni se presentan, ni cabe esperar que el régimen castrista las vaya a impulsar. En tales condiciones, la política fiscal democrática es imposible. El estado castrista tiene que dirigir su voracidad recaudatoria hacia otras bases impositivas. Generalmente, no tributarias, intentando con ello escapar de ese control democrático que los ciudadanos deben realiza

De la “fortaleza de los libros” al desastre de la industria editorial

Elías Amor Bravo, economista Acaba de cerrar sus puertas la 26 Feria Internacional del Libro de La Habana, un instrumento de propaganda del régimen castrista, que ha servido para divulgar numerosos datos e informaciones en los últimos días, y como suele ocurrir casi siempre, esconder la dura realidad. El término “fortaleza de los libros” no es mío. Parece ser que allá por 2002, Fidel Castro lo acuñó, durante la inauguración de la XI Feria Internacional del Libro de La Habana de ese año. Lo cierto es que comparar “los vericuetos de la antigua fortificación colonial española, llena de viejos cañones” con el contenido y el valor de los libros, no deja de ser una “majadería” más de quién se ha pasado toda su vida en ello. Lo cierto es que la Feria de 2017 ha cerrado con un balance destacado: según Granma, más de 1.100 acciones literarias –entre ellas unas 900 presentaciones de títulos, 28 paneles y 106 espacios de lecturas de poesía. Sin embargo, la realidad del sector del li

La vía errónea de la sustitución de importaciones: el caso Cometal

Elías Amor Bravo, economista A vueltas con la política errónea. Día si, día no, Granma presenta ejemplos de empresas a las que los planificadores del régimen les encargan “dispararse un tiro en el pie”, es decir, sustituir importaciones. Este es el caso de Cometal, una empresa estatal de producciones metálicas, que según Granma, “trabaja en aras de fabricar y comercializar productos que contribuyan al desarrollo industrial del país y a la sustitución de importaciones”. A ella dedican un artículo en el diario oficial castrista. Como se señala en Granma, Cometa l cuenta con más de 30 años de experiencia, una cifra superior a 900 trabajadores, entre ellos especialistas y obreros de amplia experiencia y calificación en sus departamentos, talleres y brigadas de montaje, distribuidos en una red que abarca todo el país. Desde 2013, la empresa trabaja en la Zona Especial de Desarrollo Mariel, donde instalaron ascensores, facturaron más de 200 módulos de facilidades temporales en baños, c

Carta abierta a don Pau Solanilla y la "verdadera revolución" de Cuba

Elias Amor Bravo, economista Me refiero en este post al artículo de Pau Solanilla, d irector general para Cuba en LLORENTE & CUENCA, titulado “Cuba comienza su verdadera revolución”, que ha sido publicado en varios medios de comunicación. El autor parte de presupuestos que no son acertados , y que pueden condicionar sus conclusiones. Ni la victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales americanas, ni tampoco el fallecimiento de Fidel Castro , y ni mucho menos, el deterioro de la economía, son aspectos que pueden “hipotecar el último trimestre del año de la isla en el nuevo rumbo que parecía haber impulsado el presidente Raúl Castro”, porque la realidad se empeña en mostrar, una y otra vez, que ese “nuevo rumbo” es apenas inexistente. Más aún, algunas de las decisiones adoptadas en ese “nuevo rumbo” del régimen castrista están provocando justo los efectos contrarios a lo que se esperaba. Ganar tiempo a toda costa sigue siendo la máxima de la dirigencia comuni

El Banco CAF y la economía castrista: ¿harán algo?

Elías Amor Bravo, economista Otra aventura. Al parecer, varios medios se han hecho eco de la visita del presidente ejecutivo del Banco de Desarrollo de América Latina (CAF), el boliviano Enrique García a La Habana. Comos siempre que ocurre con este tipo de informaciones, nos enteramos siempre a toro pasado. Nunca es posible saber, con antelación, qué se cuece en la oscuridad de la política económica castrista. Alm parecer, este directivo de CAF no perdió el tiempo en La Habana, y durante su estancia los días 8 y 9 de febrero, mantuvo diversas reuniones con altos funcionarios del régimen castrista, como el vicepresidente y ministro de economía y planificación, Ricardo Cabrisas; el canciller Bruno Rodríguez; el titular de comercio exterior, Rodrigo Malmierca, y el presidente del Banco Central de Cuba, Ernesto Medina. Muy mal deben estar las condiciones financieras de la economía castrista para que se organice un comité de recepción tan destacado. La situación parece peor de

El problema del agua en la economía castrista

Elías Amor Bravo, economista En la Cuba castrista, los apagones formaron parte de la realidad diaria para muchas familias que tuvieron que resignarse a un pésimo servicio interrumpido sin explicaciones, racionado y limitado. Pero, al igual que la energía eléctrica, son muchos los cubanos que han tenido que sobrevivir a la falta de agua. Increíble, pero cierto. No se recuerda en épocas anteriores a 1959 denuncias en la población por la escasez de agua o de electricidad. Habrá que concluir que éstos, como otros muchos problemas, son consecuencia de la llamada “revolución”. Lo curioso es cómo la oficialidad castrista, a través de su diario Granma, aborda estas cuestiones que, sin lugar a duda, crean un lógico malestar en amplias capas de la población, harta de padecer cortes de luz y cada vez en mayor medida, de agua. Un artículo reciente en Granma culpa principalmente a “la sequía prolongada durante los últimos dos años y medio” de la falta de agua que padecen, de forma directa, “

¿Producir aluminio o perder el tiempo?

Elías Amor Bravo, economista Siguiendo con el análisis de los distintos sectores y actividades productivas de la economía castrista, que hace Granma en sus páginas, hoy toca la producción de aluminio. En concreto, la carpintería de aluminio de la que se obtienen “paños fijos, puertas y ventanas, con una gran variedad de estilos y tamaños”. ¿Cuál es el problema? Básicamente que Cuba no produce la materia prima. Toda se debe importar. No pasa nada. Los países no tienen por qué ser capaces de producir de todo y abastecerse con sus propios recursos. Desde el siglo XVIII, los economistas neoclásicos mostraron que la especialización internacional en aquello en lo que se tiene experiencia y capacidades permite obtener frutos positivos del comercio e intercambio con otros países. En Cuba, la producción de carpintería de aluminio se convierte en una “batalla más del régimen”, en esa épica seudobelicista que tanto gusta describir a los corifeos que se dedican a narrar este tipo de cos