¿Para qué sirve el ALBA a Cuba?

Elías Amor  Bravo economista

Los países suelen incorporarse a los procesos de integración económica porque esperan que de ello se produzca una mejora económica sostenible. Conviene recordar que hace unas semanas se celebró en La Habana, con más penas que gloria, la XXII Cumbre de jefes de estado y de gobierno del ALBA-TCP, siglas relativas a la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América-Tratado de Comercio de los Pueblos. 

Pues bien, este es un modelo de integración regional entre diversos países que tuvo como padres fundadores a Fidel Castro y Hugo Chávez, tándem Venezuela y Cuba, al que se adhirieron otros países en distintas fechas, como Bolivia, Nicaragua, Dominica, Antigua y Barbuda, San Vicente y Granadinas, San Cristobal y Nieves y Granada.

Precisamente, este año se celebra el 18 aniversario de creación de esta alianza y con dicho motivo, los jefes de estado y de gobierno, y representantes de delegaciones reunidos en La Habana, emitieron una declaración bajo el lema “18 años de unidad y compromiso con la integración latinoamericana y caribeña”.

El documento establece los principios esenciales del funcionamiento de este mecanismo de integración económica regional, “en coherencia con los ideales de justicia social, cooperación y complementariedad económica de sus fundadores”.

A la vista de este documento, cabe formalizar algunas preguntas ¿Para qué ha servido el ALBA? ¿Acaso ha logrado mejorar las condiciones de vida y la prosperidad de los habitantes de sus países? 

No todo consiste en denunciar “la política hostil e injerencista de Estados Unidos contra los pueblos” y realmente, aburre el rechazo a la doctrina Monroe, acusándola de la desestabilización que provoca en las naciones de América Latina y el Caribe. Con este discurso, en vez de avanzar, el ALBA se retrasa más aún, cuando por un lado se dedica a denunciar las estrategias de guerra no convencional, y por otro, abren de par en par las puertas de su comercio a potencias como China.

El ALBA, moviéndose por enunciados políticos e ideológicos ha dado más prioridad a un discurso ideológico basado en las denuncias de colonialismo, esclavitud y genocidio, que a la adopción de estrategias sostenibles de desarrollo para sus países. Por medio de este debate ideológico han sentado un mal precedente a la hora de formalizar relaciones económicas y comerciales con otros países. Ni siquiera han logrado el fortalecimiento de la Celac (la Comunidad de estados latinoamericanos y del Caribe), y mucho menos lograr una imagen bien definida hacia el exterior.

Uno de los fracasos del ALBA ha sido, precisamente, querer abarcar demasiados temas sin cerrar otros definidos como prioritarios. La deriva reciente hacia el cambio climático y el impacto negativo que tiene sobre la naturaleza el desarrollo desigual entre las naciones choca frontalmente con otros principios vinculados a la mejora económica de las naciones que siguen sin ser resueltos.  

Lo mejor es recurrir a los datos económicos.

El Cuadro siguiente muestra claramente la respuesta a las preguntas planteadas. Se presenta la evolución del PIB en millones de dólares entre 2004 (año de creación del ALBA) y el dato más reciente, relativo a 2021.

Al margen de las consideraciones ideológicas, los firmantes del ALBA han experimentado evoluciones económicas muy dispares, lo que dice muy poco en favor de la integración y la cooperación, entre el récord registrado por Bolivia que aumentó su PIB un 360,4%, seguido del 141,8% de Nicaragua, o el 86,2% de Granada y el 73,2% que obtienen San Vicente y Granadinas y San Cristóbal y Nieves.

 

En millones de dólares corrientes

2004

2021

% variación

Venezuela

112.451

154.056

37,5

Cuba

38.203

22.717

-40,5

Bolivia

8.773

40.408

360,4

Nicaragua

5.793

14.009

141,8

Dominica

367

554

50,9

Antigua y Barbuda

905

1.501

65,8

San Vicente y Granadinas

522

904

73,2

San Cristóbal y Nieves

497

861

73,2

Granada

602

1.121

86,2

De ahí, el resto de los países registraron crecimientos inferiores, pero ninguno vio descender su PIB, excepto un caso único, anómalo, al que no ha beneficiado la pertenencia al ALBA, como se refleja su comportamiento macroeconómico, y que es Cuba, cuyo PIB ha disminuido un 40,5% desde 2004. Estos datos nunca han sido dados a conocer por el régimen comunista cubano, que trata de esconder aquellas cifras que no resultan de su agrado.

Cuba no solo es el único país del ALBA que no ve crecer su PIB, es que, además, el régimen comunista cubano, con su modelo económico marxista leninista, se atrasa con respecto al resto de miembros del ALBA y, enfocado en un discurso errático contra supuestos "poderes imperialistas y oligárquicos", y acentuando la denuncia en todos los foros internacionales contra un embargo/bloqueo que es inexistente, se ha quedado atrás en términos de evolución económica con respecto al conjunto de países de la organización en estas dos primeras décadas del siglo XXI. A Cuba, la pertenencia al ALBA le sirve de bien poco, en tanto que el resto de los miembros han visto crecer sus economías de forma muy destacada.   

La declaración de La Habana es un motivo de reflexión para entender por qué la economía cubana no puede superar su atraso, si no se deshace de las ataduras ideológicas de un modelo obsoleto y trasnochado. Todos los estados miembros del ALBA-TCP se desempeñan de forma eficiente, con modelos económicos que se encuentran en las antípodas del que existe en Cuba. Con ello logran aumentar su nivel de PIB y al mismo tiempo consiguen también mejoras para sus ciudadanos. El régimen cubano va en sentido contrario, y los cubanos en 2021 son un 40% más pobres que en 2004. Ni el petróleo abundante y barato de Venezuela, canalizado por esta vía, ayudó a la economía cubana en perspectiva.

A La Habana poco le importa que los estados miembros hayan apostado por la revitalización del ALBA-TCP como mecanismo de unión y bienestar de los pueblos de América. Por desgracia para los cubanos, Cuba va en otra dirección. El ALBA sirve de bien poco a la economía cubana. Los cubanos lo deberían saber.

 

Comentarios

Entradas populares de este blog

Muy deficientes resultados en la construcción de viviendas en el primer semestre

La bancarización ha quedado aparcada, otro experimento más a la basura

El Banco Central de Cuba como instrumento represor del régimen